En una cama donde antes solía haber una mujer, hoy yace la confusion. Una cama caliente, que actualmente está más fría que nunca.
Es más, no solo la cama. Sino también mi corazón.
Estoy confundido.
Estoy solo y confundido.
Puedo hablar, puedo callar. Puedo volver o puedo seguir. Puedo mirar o puedo hacer de cuenta que no vi nada.
Cómo darme cuenta qué es lo que quiere mi corazón. Realmente el estilo de vida a su lado, lo hacía felíz. O para evitar la soledad, cualquier cosa le parecía aceptable. No lo sé. Simplemente no lo sé.
Aunque entonces, si de todo esto puedo decir que solamente quería estar acompañado, por qué hablo de la necesidad de extrañarla... mejor dicho; por qué CREO que la extraño?
Si como ella va a ver miles a lo largo de la vida. Es una mujer. Nada más.
O me equivoco?
Será que ella logró entrar donde nunca antes dejé entrar a otra persona? Será que realmente la ame?
Cómo saberlo, si estoy confundido.
Es díficil realmente esta situación. Pero no imposible.
Tengo frente a mis ojos, la posibilidad de estar con otra persona que me interesa; y sin embargo, busco lo que ya no tengo
Excusas, excusas, excusas.
Cómo le hago saber a esta nueva persona que no quiero ser partícipe de una nueva historia , porque todavia no supere del todo lo anterior. Cómo hago para decidir que es lo mejor para mi vida. Si seguir. Si esperar. Si callar. Si hablar.
Por qué a pesar de besar otras mujeres en este tiempo; no siento la misma sensación. Es decir, me falta esa adrenalina, la química que sentia antes, el fluir de sangre a toda prisa. Sólo pasaba con ella.
Puta madre.
A pesar de tener lo que quiero, busco lo que me falta. Y no hablo de bienes materiales.
Es una transicion. Supongo. Acostumbrarse al cambio.
No tengo respuestas en este momento.
Solo sé.. QUE ESTOY CONFUNDIDO.
PAZ Y AMOR GENTE.
Confusión. Honestamente no sé si la siento aún, en esta vida. En la anterior, la del que fui, ese niño hoy muerto, la confusión era casi una amiga. Un escudo invisible contra enemigos que no conocía aún. Hoy existe una especie de certeza, la certeza de no saber. La certeza de no penetrar del todo en nada, una confusión que quizás es sólo conocer los resultados y no lograr saborearlos del todo. Un placebo que me permite creer que las cosas no son así.
ResponderEliminarPor su puesto que ahora la confusión es mala. Pero a la vez mientras más caminamos más averiguable se vuelve todo. Sólo hay que volverse medio kamikaze.